sábado, 29 de noviembre de 2008

¿PAÍSES CIVILIZADOS?



El impasse con Chile generado por las declaraciones de nuestro “conspicuo” Comandante General del Ejército Edwin Donayre ha puesto de manifiesto lo tan retardado que puede ser un militar. Si bien las declaraciones de sacar a chilenos en cajones si entran a nuestro territorio o en bolsas de plástico se realizaron en un ambiente coloquial con otros mandos y fuera de algún evento castrense, las reacciones de parte del país sureño no se hicieron esperar pidiendo la cabeza inmediatamente del infamante comandante. Y bueno, acompañado de las voces provenientes de la política mapocha que aprovechan el menor incidente para generar discusiones y enfrentamientos. Ya llevamos a la Corte de la Haya nuestro problema limítrofe y era de esperar una reacción. Claro está que entre los militares peruanos el odio generalizado a Chile o Ecuador por los tiempos de guerra ha pasado de generación en generación y los ciudadanos o “civiles” como ellos nos llaman, somos inyectados por ese odio. A estas alturas no se puede pensar en utopías y fronteras libres, pero hay muchos habitantes peruanos y chilenos que no comparten ese mismo odio generalizado que jala la política como cadena de buque carguero. Es por eso que tales afirmaciones ofensivas y fuera de lugar son las que empañan las relaciones de los países y demuestra lo poco civilizado que somos. Claro que Chile no se queda atrás, el Comandante General del Ejército, Oscar Izurieta, también se manifestó anteriormente a lo dicho por Donayre: "Chile no tiene pensado invadir al Perú porque lo puede comprar". (Pirateo a Heduardo)
Donayre, quien a partir de su nombramiento buscaba acercar a la población y mantener un vínculo más estrecho con las Fuerzas Armadas lo único que hace es alejarla gracias a la publicación en YouTube.
¿Somos un país de cavernícolas?
Mientras el gobierno y sus funcionarios no se comporten torpemente, mientras exista la corrupción, mientras seamos tolerantes y no críticos ante nuestro modo de vida, mientras los medios de transporte estén limpios por dentro y por fuera, mientras que el chofer que los conduce y su respectivo cobrador estén pulcros, mientras se respeten los paraderos autorizados, mientras los vehículos no usen las veredas como estacionamientos, mientras no contaminemos el ambiente con gases tóxicos, mientras exista asesinato a policías, mientras exista soborno a policías, mientras exista el narcotráfico y la delincuencia, mientras existan leyes que los amparen (la lista continúa), no pidamos ser un país progresista y civilizado. Atrás quedó la fachada del Apec.
La frase: “El Perú es más grande que sus problemas” quedó chica a estas alturas.

1 comentario:

adivinaquiensoy dijo...

Es dificil hablar de civilización cuando observamos como el mundo se mueve por los intereses de quienes que a la larga terminan siendo los mas poderosos (nada nuevo la verdad). Y es que en pleno siglo XXI se hace cada vez mas alarmante saber que la historia no ha cambiado en nada: la intolerancia existió y existirá por siempre por ello el "que hubiera pasado si", y el "mientras" seguirán siendo motivo de futuros análisis que a larga quedará en eso. Lo que pasó con Chile es una verguenza pero también una ratificación de que los anti peruanos y antichilenos existirán a perpetuidad. ¿Quien se ha salvado de no decir maldito chileno? creo que nadie y lo mismo pasará con ellos por los siglos de los siglos. Amen. Suerte