

Jueves, día complicado de la semana. Desde temprano, en la cola que daba la vuelta al Estadio Nacional, los polos negros con innumerables dibujos de “Eddie”, la mascota del grupo, se veían de diferentes tamaños, formas y colores. Tres generaciones esperaban en la inclemencia del sol del mediodía. Muchos habían pedido permiso en sus trabajos, se habían enfermado o simplemente se rebelaron ¡Cómo es posible que tu jefe no conozca de quiénes se trata! La noticia dio la vuelta al mundo, los ingleses por primera vez visitaban Perú. Ese lejano país que tiene una maravilla mundial, “Machu Picchu” y una comida deliciosa que ya traspasó fronteras.
Habíamos comprado los tickets de un tren del cual no sabíamos su destino hace tres meses. Sin embargo, teníamos la certeza que la ruta que tomara sería la indicada.
Tres de la tarde. La gente se impacienta, muchos corren, regresan a sus colas. Se escucha que ya van a abrir las puertas. La fila empieza a avanzar. La Tropa camina lentamente ilusionada. Recuerdan la letra de “The Trooper “Me quitarás mi vida, pero yo también te quitaré la tuya”. Llegamos a la puerta del coloso, rota la entrada, a buscar la mejor ubicación para presenciar el show. Encontramos un lugar privilegiado. Treinta metros aproximadamente, no está mal. Telas negras ocultaban el escenario. Seis integrantes de mi tropa hicimos un círculo y nos sentamos a descansar. El cielo estaba nublado pero iluminado por momentos. El sol implacable nos desgataba. Le pedíamos que se alejara, finalmente se ocultó.
La noche. Era atípica, se pasaba lentamente. Siete de la noche, sale la banda nacional MASACRE. Quisieron calentar el ambiente insultando a la tribuna y escupiendo el escenario donde tocarían los dioses, qué falta de respeto y que desagradable. Se fueron. Le tocó el turno a la hija de Steve Harris, bajista y fundador de la banda. Los pantalones de cuero ceñidos y su rostro ‘dark’, excitó a la fanaticada. Lauren Harris cumplió su cometido. Desarmaron los equipos y todo quedó oscuro, era el preludio a lo que venía.
Un poco más de la nueve de noche. Transilvania sonó y las imágenes aparecieron en las dos pantallas gigantes. Un homenaje a los fans. El famoso discurso de Winston Churchill, que animaba a sus compatriotas a luchar contra la invasión nazi, fue el inicio para “Aces High” y el estadio estalló. La voz de Bruce Dickinson, el bajo de Steve Harris, las guitarras de Dave Murray, Adrian Smith, Janick Gers; y la batería de Nicko McBrian, nos llevaron por un vórtice al pasado, estábamos viviendo el viejo sueño cuando, ya grandes, entre copas comentábamos con los amigos ¿Vendrán algún día? Transformándose nuestros rostros incrédulos.
¡Scream for me Lima! Dickinson dijo la famosa frase esperada de la noche. Lo que vino después, fue una ráfaga de sus mejores canciones: "Two Minutes to Midnight", "Run to the Hills", "Fear of the Dark", ", "The trooper", "The number of the beast", y "Wrathchild". El gran Bruce, saltaba, corría, derrochó una potencia impresionante a su edad. Cuando salió con la máscara tribal cantando “Powerslave” le rendimos pleitesía. A los gritos seguidos de ¡Scream for me Lima! y ¡Scream for me Perú! los ojos llorosos de algunos fanáticos de base 3 y 4 se dejaron ver. El sueño es real. Iron Maiden estaba tocando, igual que sus discos. El impecable sonido de la banda, su puesta en escena, la salida de la mascota del grupo, “Eddie”, demostró que estábamos ante unos artistas de primera categoría y nosotros, devotos, no los defraudamos y ellos, en recompensa, nos regalaron sus objetos.
A pesar que no hubo la pirotecnia prometida, ni salió la momia, pasó desapercibido por la entrega del grupo. Algo que hablaremos unos buenos meses.
Prometieron regresar el 2011. Solo un pedido: Cambien de organizador.
Tomado de RimachiSialer
Video máscara
Desde ahora, los aficionados al buceo mientras filman su experiencia podrán tener las extremidades libres. La compañía norteamericana Liquid Image presentó en la pasada edición de CES 2009 la serie Scuba HD320 Camera Video Mask. Una gama de máscaras acuáticas que permiten grabar vídeo en alta definición y además hacer fotos.