martes, 19 de agosto de 2008

¡POLLITO A LA BRASA CON SUS PAPAS Y AJÍ!


Es evidente que este Congreso no le quita méritos al anterior. Es más, podría apostar que es peor. Sin duda que la emoción de las elecciones y el desesperado pedido de los pueblos olvidados ante las promesas de los candidatos es un plato que se repite sempiternamente Pero ¿Por qué nos gusta tanto ese plato? La mente del peruano es increíble y una vez más los repito: Frágil. Hecha del más fino cristal que se rompe con facilidad. Para muestra un botón que voy a pasar a describir a continuación.
Las mujeres en el Parlamento, pensaba, que me habían decepcionando. Primero fue la congresista de (UN) Elsa Canchaya, luego la aprista Tula Benítez y finalmente la upepista Margarita Sucari. Todas mujeres las que cometieron irregularidades que fueron condenadas en los medios y la población. Pero no, me equivocaba, la cereza o diré el pollito que coronó el pastel fue la sinvergüenzada del legislador Carlos Anaya quien podría ir a la cárcel -si es que no lo escudan- por haber adulterado boletas por consumo desmesurado de pollo a la brasa para justificar sus gastos operativos. “Otorongo no come Otorongo", dicen; aunque este otorongo tiene muy buen apetito. Es tan idiota que se le ocurre poner por consumo de pollo en un mismo día 428 soles y para colmo en restaurante de medio pelo que ni lo conocen.

¡Ah! Se me olvidaba también ese tal Ricardo Pando que se le acusó de contratar empleados 'fantasmas'. Todas las bancadas tienen sus anticuchos. ¡Increíble!

Insisto ¿Por qué nos gusta repetir el plato? ¿Por qué cometemos errores con este tipo de gente que tanto daño le hace al país? Falta educación le dicen, somos un país inculto, también lo he escuchado. Somos olvidadizos, yo lo repito. Hay hermanos muchísimo que hacer y no hemos hecho ni un carajo. Y así piola pasan todos los gobiernos, pasan como si fuera un terremoto de 7.9 que deja un atraso de 50 años.

Vamos a ver que es lo que pasa en el transcurso de las próximas semanas, por lo pronto el APRA ha impuesto a Martha Moyano para que presida la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales, lo que no garantizaría un trabajo imparcial. Moyano defendió en su momento a la cuestionada Tula Benítez y Ricardo Pando por contratar empleados fantasmas.

Empiezo a tener malestar estomacal.

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